La consulta a listas además de obligatoria, ayuda a prevenir que nuestra empresa se relacione con personas que ya han sido vinculadas previamente con actos ilícitos o que por sus características nos pueden exponer a riesgos reputacionales y legales.
“Nada sucede por casualidad. Es una cuestión de acumulación de información y experiencias.”
Pero, quiénes pueden realizar una operación inusual con nuestras empresas?.
Es usual que quienes intentan realizar este tipo de operaciones recurran a personas “limpias”, sobre las cuales no hay dudas aparentes en su comportamiento para facilitar la cristalización de sus operaciones de Lavado de activos y/o Financiación al Terrorismo.
Quienes intentan realizar operaciones inusuales procuran realizar transacciones dentro de parámetros no detectables por mecanismos convencionales de monitoreo, como la consulta a listas, la verificación de montos en las transacciones o la aplicación de reglas de negocio ya tipificadas y conocidas.
Para prevenir este tipo de situaciones, se recomienda a los profesionales de cumplimiento, la utilización de herramientas de inteligencia artificial, aplicadas por los denominados “científicos de datos” quienes pueden construir con ellas modelos de segmentación y monitoreo operacional para identificar grupos de riesgo, sus características, construir perfiles sobre transacciones que se identifiquen como inusuales y generar alertas para la debida diligencia.