Los $615.300 millones que Euromonitor estima mueve Colombia en turismo médico, los $990.500 millones que espera se manejen en 2024 y la situación local del sector salud con las enormes cifras que EPS´s y el estado adeudan a clínicas, IPS’s y prestadores; son factores que motivan a la exploración del nuevo mercado de atención médica a pacientes internacionales.
Es innegable que dichas operaciones involucran niveles altos de riesgo asociados a LAFT, lo que obliga a que los oficiales de cumplimiento definan políticas y procesos orientados a blindar la prestación del servicio en dichas condiciones, en acuerdo y armonía con el área comercial con el fin de posibilitar y viabilizar la capitalización de esta enorme oportunidad sin exponer las instituciones a riesgos innecesarios.
Hechos como la calidad en la prestación del servicio de salud en Colombia, su menor costo respecto a otros lugares (entre 10% y 35% menos para el caso de USA), el reconocimiento internacional en innovación médica de nuestros profesionales, la exención de IVA para turistas y la devaluación del peso frente al dólar, son razones de peso para que al país lleguen anualmente alrededor de 50.000 pacientes extranjeros con necesidades en medicina (cifras del ministerio de turismo). Colombia ocupa actualmente el segundo puesto en el ranking de países más visitados por extranjeros para la realización de cirugías plásticas.
Todo lo descrito anteriormente constituye en sí mismo un conjunto de buenas noticias para el sector salud y para el país; pero es también un llamado a la acción a equipos de cumplimiento que son los encargados de garantizar que dichas operaciones se realicen exitosamente, sin riesgos de ningún tipo tanto para las instituciones como para los pacientes.
Es innegable que dichas operaciones involucran niveles altos de riesgo asociados a LAFT, y que sus características como:
- Particularidad del servicio,
- Ingreso de moneda extranjera,
- Participación de broker y terceros como intermediarios,
- Atención a gobiernos no cooperantes,
- Atención a pacientes de países de alto riesgo,
- Responsabilidad migratoria sobre cada paciente y acompañantes,
- Demanda de servicios hoteleros y transporte como parte de la atención,
- Recepción de pagos anticipados,
- Solicitudes de cancelación o devoluciones con giros a ubicaciones internacionales
Que obligan a que los oficiales de cumplimiento definan políticas y procesos orientados a blindar la prestación del servicio en dichas condiciones, en acuerdo y armonía con el área comercial con el fin de posibilitar y viabilizar la capitalización de esta enorme oportunidad sin exponer las instituciones a riesgos innecesarios.
Teniendo en cuenta que hoy no existen desde la normatividad lineamientos claros y específicos que marquen el camino a seguir, la situación se convierte en un reto para que cada equipo de cumplimiento defina la mejor forma para afrontar estos nuevos desafíos.
En Agnos trabajamos de forma continua en la identificación de ventanas de riesgo y la construcción de mecanismos de control y monitoreo a través de modelos de segmentación y detección de operaciones inusuales para este contexto, que constituyen una excelente herramienta para las entidades de salud que están considerando incursionar en el mercado internacional garantizando la robustez del sus sistemas de prevención de riesgos de LAFT.